Isla Socorro, Archipiélago de Revillagigedo: recuperación de los ecosistemas en un Área Natural Protegida estratégica para México
Abstract
La Isla Socorro, parte de la Reserva de la Biosfera Archipiélago de Revillagigedo, es de suma importancia para la conservación de la biodiversidad de nuestro país. En ella habitan 117 especies de plantas vasculares, de las cuales el 26% son endémicas. Cuenta con una especie de reptil endémico y 103 especies de aves, ocho de las cuales son endémicas. El ecosistema de la isla fue impactado a lo largo de 150 años por la presencia de borrego doméstico y por la introducción de gatos asilvestrados. Los borregos causaron modificación del hábitat, pérdida de la cobertura vegetal del 30% de la superficie de la isla, compactación y erosión del suelo; en tanto los gatos mantienen bajo constante presión a las poblaciones de vertebrados nativos: contribuyeron a la probable extinción en el medio silvestre de la paloma de Socorro y del tecolote de Socorro, y a la disminución de las poblaciones de pardela de Revillagigedo, especie declarada en peligro de extinción. Ante esta problemática, a partir de 2009 se iniciaron las acciones para la erradicación de borregos introducidos y en 2011 se dio inicio al proyecto de control de gatos. El presente trabajo tiene como objetivo comparar, describir y evaluar la sucesión de especies de flora y fauna, y los cambios de cobertura vegetal en los sitios alterados por los borregos, así como la recuperación de las poblaciones de vertebrados nativos a medida que avanza el programa de control de gatos. Para ello, se realizaron recorridos terrestres en búsqueda de borregos remanentes, mediante la localización de borregos Judas y el uso de perros de muestra, se documentó el avance en el programa de monitoreo y control de gatos, se realizaron análisis de compactación y propiedades físico-químicas del suelo, se evaluó el cambio en la cobertura vegetal mediante la comparación de imágenes de satélite pre y post erradicación de borregos, se llevaron a cabo monitoreos anuales de vegetación en los sitios impactados por los borregos, así como de las poblaciones de lagartija azul y aves terrestres nativas. A partir de la erradicación de los borregos se observó la recuperación de la cobertura vegetal, al pasar de 20% en 2009 al 80% en 2014. Mediante análisis de imágenes de satélite se determinó un aumento de la cobertura vegetal en el 11% de la superficie de la isla, lo que corresponde a 14.5 km2. La germinación de especies pioneras ha contribuido a la recuperación de las condiciones físico-químicas del suelo. En los sitios recuperados se determinó un aumento significativo en el carbono orgánico, nitrógeno total y otros elementos esenciales para el desarrollo de la vegetación. Los análisis de suelo señalan que ha disminuido la compactación del suelo. La recuperación de la vegetación proporciona mayor disponibilidad de alimento y refugio, a la par de la disminución del depredador exótico de la isla, lo que ha permitido la recuperación de las poblaciones del reptil y aves endémicas de la isla.