Historia de vida de Homalonychus selenopoides (Araneae: Homalonychidae) en el Desierto de Sonora
Abstract
Homalonychus selenopoides Marx, 1891 es una especie de araña endémica de las planicies
costeras del Desierto Sonorense en el estado de Sonora, México y del suroeste de los
Estados Unidos de Norteamérica. Aunque la especie fue descrita taxonómicamente hace
más de un siglo, nada se sabe acerca de su biología y ecología. El propósito general del
presente trabajo fue caracterizar la historia de vida de esta especie; particularmente, su
fenología y microhábitat en el campo, y su comportamiento reproductivo, defensivo, y
ciclo de vida en el laboratorio. Estos rasgos fueron comparados con los reportados para H.
theologus para inferir sobre su valor adaptativo. Durante el 2008 se recolectaron 473
especímenes y 67 ovisacos en el sur del Desierto Sonorense, en México. En el campo, el
ciclo de vida es anual y la fenología es marcadamente estacional. Los ovisacos, al igual
que los reclutas, ocurren en el campo sólo de abril a julio, juveniles todo el año, machos
de noviembre a abril y hembras de noviembre a mayo. Se encontró una correlación lineal
negativa entre las temperaturas promedio y la abundancia de adultos (R = -0.9353; P <
0.0001), como un posible indicador de la influencia de la temperatura en el entorno biótico
de la región. Se criaron dos lotes de arañas para el estudio de ciclo de vida. Después de la
oviposición, las arañuelas de instar II tardan ~50 días en emerger del ovisaco. Los machos
maduran después de 8-10 mudas y las hembras después de 9-11 mudas. Los machos
maduraron más rápido (577.3 ± 35.9 días) que las hembras (622 ± 11.6 días) (t = 4.499; P
< 0.0001). El tiempo de desarrollo de los instares ninfales no se incrementó
progresivamente sino que fue irregular, y diferente entre ellos (Lote 1: H = 196.525; P =
0.0000; Lote 2: H = 132.544; P = 0.0000). Las temperaturas promedio del laboratorio y el
porcentaje de mudas por mes estuvieron lineal y positivamente correlacionados (Lote 1: R
= 0.6633; P < 0.005; Lote 2: R = 0.8466; P < 0.0001). Un alto porcentaje de arañas
murieron antes de alcanzar el estado adulto (69.6% en el Lote 1 y 85.9% en el Lote 2);
esta mortalidad estuvo asociada principalmente a la muda (69.6% en el Lote 1 y 65.6% en
el Lote 2). Una proporción importante de estas muertes se asoció a ataques de larvas de
Tenebrio contra las arañas antes o durante la muda. Las curvas de sobrevivencia resultaron
intermedias entre el Tipo I y el Tipo II de Pearl (1928). La longevidad de machos y
hembras recolectados en campo como instares tardíos fue de 82.9 ± 23.8 días y de 481.4 ±
183.5 días, respectivamente. El comportamiento reproductivo fue analizado en el
laboratorio, para lo cual se grabó con una cámara infrarroja, principalmente en la noche.
La inducción de esperma es de tipo indirecto; los machos tejieron una tela espermática de
aproximadamente 2 cm2 cerca del suelo. Los machos y las hembras elaboran hilos de seda
y arena, como rastros. El comportamiento de cortejo fue intermedio entre los niveles I y II,
y la posición de cópula fue de Tipo 3 modificado, donde el macho ata las patas de la
hembra con seda antes de copular. El canibalismo sexual puede ocurrir durante o después
de la cópula. Las hembras inician la construcción de su ovisaco ~11 días después del
copular y lo concluyen en ~15 h, incluyendo la oviposición. La lámina externa del ovisaco
contiene arena, y el saco estuvo rodeado por una guarnición de cordones de seda y arena,
posiblemente para proteger a los huevos de la desecación y como una barrera contra parásitos y depredadores. Los juveniles, los subadultos y los adultos exhiben todos los
actos del comportamiento de empolvado y enterramiento. Aunque los machos exhiben
estos comportamientos, las partículas de suelo no se adhieren a las sedas de su cutícula. El
trampeo pitfall fue ineficiente para la recolecta general de individuos de esta especie, pero
resultó valioso para indicar su época reproductiva. Esta es una de las pocas especies de
arañas que son activas en invierno y que los adultos ocurren y tienen su actividad sexual
en este periodo. Su comportamiento reproductivo, defensivo, su ciclo de vida y su
fenología le confieren aptitud y especialidad para existir en el Desierto Sonorense.