Definición de los requerimientos nutricionales de juveniles y pre-adultos de la langosta de agua dulce Cherax quadricarinatus, con especial énfasis en la realidad proteína/lípido
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Fecha
2003Autor
Cortés Jacinto, Edilmar
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Mostrar el registro completo del ítemResumen
El cultivo del acocil (crayfish) del género Cherax, también conocido como langosta de agua dulce, ha recibido atención considerable entre los productores acuícolas y agrícolas en México, debido a sus características biológicas y a la necesidad de considerar especies alternativas para la producción acuícola. Una de las limitaciones importantes para el éxito del cultivo comercial de Cherax quadricarinatus ha sido la falta de información apropiada en los aspectos nutricionales y las prácticas alimenticias de la especie.
Se realizaron cuatro evaluaciones experimentales para determinar los requerimientos en proteína y lípidos de la especie en las fases de juveniles y pre-adultos, así como la frecuencia alimenticia óptima.
El requerimiento de proteína para juveniles de C. quadricarinatus (1.08 ± 0.34 g) se definió en función a la respuesta de diferentes niveles de proteína cruda (PC) en la dieta (20, 25, 31, 37, 43, 49, y 55%) y un rango de 18.73 a 21.45 kJ/g de energía. La evaluación se realizó en unidades experimentales (UE) de 1500 l, a una temperatura de 27 ± 1 ºC por un período de 60 días. El peso y la mayor tasa de crecimiento específico (TCE) (P menor a 0.05), con valores de 9.6 y 3.64 %/día, respectivamente, fueron obtenidos con la dieta 31% PC, equivalente a 27% (PD), que representa el nivel de proteína digestible sugerido para juveniles de 1 a 10 g.
El requerimiento óptimo proteína/lípido (P/L) de juveniles de C. quadricarinatus se definió en función a la respuesta de dietas formuladas con tres niveles de proteína cruda (PC) (26, 31 y 36%), y tres niveles de lípidos en la dieta (4, 8 y 12%), con un rango de proteína digestible/energía dígestible (PD/ED) de 14.6 a 22.6 mg de PD/kJ de ED. Los juveniles (0.71 ± 0.13 g) fueron alimentados por un período de 60 días en UE’s de 40 l a una temperatura de 28 C. El peso más alto, la TCE mayor y la biomasa más alta, con valores de 7.0 g, 3.67 %/día y 370.2 g/m2, respectivamente, fueron obtenidos con la dieta de 31% PC y 8% L. El crecimiento óptimo para juveniles se estimó ajustando un modelo cuadrático ( ) en 32% PC. Los resultados indican que una dieta con 26.3% PD, 7.5% de L con una proporción de PD/ED de 18.4 mg de PD/kJ de ED es el óptimo para juveniles de 1 a 7 g en las condiciones experimentales evaluadas.
Para determinar el requerimiento de proteína de pre-adultos de C. quadricarinatus, machos (23.1 ± 0.58 g) y hembras (21.8 ± 0.33 g) se evaluaron cinco dietas con diferente nivel de PC (22, 27, 33, 39 y 45%) equivalente a PD (17, 20, 24, 28 y 32%) y un rango de ED de 14.32 a 15.21 kJ/g. Se determinó el nivel óptimo de proteína para el crecimiento de pre-adultos de C. quadricarinatus en cultivo mosexual, por un período de 70 días. El peso final y la tasa de crecimiento absoluta (TCA) en los machos fue significativamente más alto (P menor a 0.05) que para las hembras alimentadas con los tratamientos de 22, 27, y 33% de PC. Los resultados indican que una dieta con 22% de PC equivalente a 17% de PD, con una proporción de proteína/energía P/E de 11.4 mg/kJ, produce una mejor crecimiento en pre-adultos machos de C. quadricarinatus.
El efecto de la frecuencia alimenticia en el crecimiento y sobrevivencia de juveniles (0.89 ± 0.6 g) de langosta de agua dulce Cherax quadricarinatus, fue evaluado con cuatro diferentes frecuencias de alimentación por día: cada C1=1 vez/ día; C2= 2 veces/ día; C3= 3 veces/ día y C4= 4 veces/ día, por un período de 60 días. Tasas de crecimiento específico (TCE) de 3.02 y 2.79%/día, muestran que las frecuencias alimenticias C3 y C4 maximizan el desarrollo de juveniles de C. quadricarinatus. El incremento en peso de los juveniles de C. quadricarinatus indica que la frecuencia de alimentación óptima es de al menos tres veces al día de manera racionada.
En base a los resultados presentados, se puede concluir que para el acocil C. quadricarinatus, el requerimiento de proteína y energía es similar al de juveniles de otros decápodos. Conforme aumenta la talla disminuye el requerimiento relativo en proteína. Los machos aprovechan mejor la energía para el crecimiento a partir de los 20 g. Esto puede relacionarse con la canalización de la energía hacia la reproducción por parte de las hembras, ya que un incremento de disponibilidad de proteína no se relaciona con un incremento en peso. La frecuencia alimenticia afectó la capacidad de aprovechamiento de los nutrientes en la dieta por lo que se debe evaluar la estabilidad, digestibilidad de alimentos comerciales y su aprovechamiento en términos de los parámetros productivos.